Se medía usando un escandallo, que es uno de los primeros, y de los más sencillos, instrumentos de navegación que ideó el hombre, y que aún continúa utilizándose en su forma primitiva. A pesar de su extrema simpleza apenas se conocen la mayor parte de sus características: la elección del peso, forma y material del escandallo; la opción de la longitud de la sondaleza (la cuerda desde la que se colgaba), así como los diferentes usos que tenía.
