Ya está abierta la pre-inscripción en el III Curso de Patrimonio Marítimo Europeo.
El archipiélago de San Lázaro es la forma utilizada en el siglo XVI para referirse a las islas Filipinas. Fue Magallanes quien las nombró así en 1521, porque en el día de su llegada se celebraba la onomástica de este santo. Así comenzó una era de influencia y posterior dominio español. También se llamaron, en esos momentos, las islas de Poniente, evidentemente por su situación geográfica.

Pero la historia de cómo se llegó a esta zona del mundo es mucho más compleja.
¿Pretendían realmente llegar a estas islas?
La expedición de Magallanes no tenía por objeto alcanzar las Filipinas, que no se conocían, sino a las Molucas (hoy en Indonesia). El factor que motivó a España y a Portugal era llegar a “las Indias Orientales», en el continente asiático, para conseguir el control del comercio de las especias, fundamentales tanto para conservar los alimentos como para condimentarlos. Las Molucas se llamaban entonces las islas de la Especiería, ya que eran las que producían las más caras de todas las de su clase, tales como el clavo o la nuez moscada. En esta carrera por llegar antes, fueron los portugueses los que ganaron, ya que consiguieron controlar la ruta del Cabo de Buena Esperanza hasta la India. Un tratado firmado con España les otorgaba el monopolio de esta larga ruta hasta el sudeste asiático, lo que significaba que los navíos españoles no podían llegar allí siguiendo este derrotero.

La división del mundo recién descubierto
En el año 1494 se había firmado el Tratado de Tordesillas, por el cual se estableció un reparto de las zonas de navegación y conquista, mediante una línea situada a 370 leguas al oeste de las islas de Cabo Verde, para evitar un conflicto de intereses entre las coronas de España y Portugal. Este acuerdo garantizaba al reino portugués que los españoles no interfirieran en su ruta del cabo de Buena Esperanza, ya que debían navegar por el lado contrario, el oeste.

Llegar a Asia cruzando el Atlántico
Este acuerdo supuso que se hiciera necesario buscar rutas alternativas, y una de ellas fue la propuesta por Colón. Según él, se podía llegar directamente a Asia atravesando el Atlántico. Lo que ocurrió es que en su primer viaje pudo ver que su idea era errónea, ya que primero debía atravesar unas masas de tierra entonces desconocidas, las Américas, para navegar después por el mayor océano de la Tierra, el Pacífico. El gran marino sabía mucho, pero le faltaban estos datos esenciales.

El archipiélago de San Lázaro
Una vez establecidas las reglas entre los dos reinos que iniciaron la saga de los descubrimientos, tras llegar a América, faltaba conseguir la ruta de las especias, pero por el oeste. Así, partió en 1519 la armada española, curiosamente al mando de un navegante portugués, Fernando de Magallanes, que logró cruzar por vez primera la punta sur del continente americano, cuyo estrecho lleva actualmente su nombre. El acceso al océano Pacífico se produjo en 1520, al que siguió una larga y penosa navegación de varios meses con recalada en las islas Marianas y una estancia en las islas de Mactán, donde Magallanes perdió la vida. Juan Sebastián Elcano sería a partir de ese momento el nuevo líder de la expedición que, con tremendas penurias y estrecheces, logró llegar al puerto de Palos en España dos años después, con un enorme cargamento de especias.

Una vez que la expedición de Elcano había vuelto a España, pasados unos años, las dos potencias ibéricas firmaron el Tratado de Zaragoza en 1529, para delimitar exactamente las zonas de influencia portuguesa y española en Asia, ya que ambas naciones pensaban que las Molucas estaban en su área establecida en el anterior tratado de 1494. Con el nuevo acuerdo quedó claro que formaban parte de la zona lusa.

Las islas Filipinas
Años después, partiendo desde México, un nuevo navegante, Ruy López de Villalobos, tras fondear allí, decidió denominar a algunas de las islas con el nombre del monarca, Filipinas. Con el paso del tiempo este se amplió a todo el archipiélago, que se ha mantenido desde 1559 con pequeñas modificaciones.

Sobre estas islas se pueden apreciar algunas de las imágenes que hemos añadido y también se puede consultar una entrada previa a esta. Fue un territorio que formó parte de la corona española hasta 1898.



Más información
BERNABÉU ALBERT, Salvador. Tras la estela de Magallanes: tres siglos de expansión hispana en el Pacífico. El océano Pacífico. Conmemorando 500 años de su descubrimiento. Madrid: Fundación Ramón Areces, 2014, p. 61-71.
CAMPO LÓPEZ, Antonio Carlos. La presencia española al sur de Filipinas durante el siglo XVII. Estudio del asentamiento español en las islas Molucas y su influencia en los territorios circunvecinos. Tesis doctoral UNED, 2021.
CERVERA JIMÉNEZ, José Antonio. La entrada de Filipinas en la órbita hispana, 500 años después. Otros Diálogos, 2021, 15.
GORRIZ ABELLA, Jaume. Filipinas antes de Filipinas. El archipiélago de San Lázaro en el siglo XVI. Madrid: Polifemo, 2010.
MARTÍNEZ SHAW, Carlos (ed.). El Pacífico español de Magallanes a Malaspina. Madrid: Ministerio de Asuntos Exteriores, 1988.

Excelente artículo. Éste es el camino.
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Muchas gracias. Un saludo
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